La gestión creativa del cabreo
Jaime Izquierdo Vallina
KRK
199 págs.
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El cabreo, definido como una emoción negativa, ha sido históricamente relegado frente a otras emociones con mejor prensa, mejor tratadas por estar vinculadas a los buenos estados de ánimo. La gestión creativa del cabreo aporta un punto de vista diferente para intentar superar los prejuicios contra una emoción a la que tanto debe la humanidad.
Muchos de los grandes genios que tuvieron ideas revolucionarias o protagonizaron descubrimientos trascendentes, fueron en principio, y antes de pasar a la historia por sus aportaciones, personajes cabreados que tuvieron que luchar contra lo establecido. Sus avances no hubieran sido posibles sin, primero, haberse cabreado y, segundo, haber controlado esa energía cabreante, domándola, depurándola y utilizándola como combustible para demostrar el acierto de sus postulados. Y lo que es de aplicación para los adelantados lo es también para el común de los mortales, tanto en lo individual —y para los más diversos y cotidianos asuntos— como en lo colectivo, para resolver los desatinos de nuestro modelo de sociedad.
Tomar conciencia del enorme potencial energético que el cabreo pone a disposición de la ciudadanía en estos tiempos convulsos es esencial para evitar deslizarse por el lado oscuro —que lo tiene, y muy destructor— y activar la creatividad superadora de tanto malestar.