La Biblioteca de Allande ha comenzado a realizar, en este mes de marzo, una actividad de animación a la lectura que tiene la particularidad de estar dirigida a la tercera edad. Estamos habituados a encontrarnos con múltiples actividades de dinamización lectora para los usuarios infantiles y también para los adultos, con los distintos clubes de lectura y presentaciones literarias, pero no es fácil encontrar actividades de animación a la lectura específicamente diseñadas para este grupo social, que en casos como el de Allande, un concejo del occidente de Asturias con apenas 2.000 habitantes y una población muy envejecida, su realización es casi una necesidad dentro del compromiso social de la biblioteca.
En colaboración con el CRAD (Centro Rural de Apoyo Diurno), la Biblioteca Pública Municipal “Celestino Valledor” ofrece una acividad de extensión bibliotecaria que tiene como principal objetivo acercar la lectura a los mayores que pasan su jornada diurna en este centro situado en la capital del concejo allandés. La Biblioteca prestará un lote de revistas y libros que el personal del CRAD trabajará semanalmente diseñando alguna actividad relacionada y adaptada a estas personas de edad avanzada.
Para esta actividad es primordial contar con esa colaboración de personal especializado y habituado al trabajo con las personas mayores y en este caso la biblioteca ha tenido la suerte de contar con la colaboración de los responsables y trabajadores del CRAD, que han diseñado un programa específico a modo de taller de lectura, que realizan en este Centro de Apoyo Diurno todos los martes y jueves, de 11 a 12 horas.
Es un taller concebido como espacio de socialización, de respeto e interacción, que genera un lugar propicio para el desarrollo de diferentes actividades vinculadas a la lectura, pero siempre aspirando también a que los integrantes puedan darle continuidad en sus casas y en el medio en el que se desenvuelven, incorporado la lectura a su actividad habitual.
La lectura y la inquietud cultural contribuyen sin duda alguna a mejorar la calidad y la prolongación de la vida activa y fecunda de las personas de la llamada tercera edad, ayudando, además, a eliminar la prejuiciada barrera mental de la supuesta incapacidad o limitación intelectual y física de la vejez, históricamente heredada de formaciones económico-sociales precedentes. Con esta actividad se intenta vencer esas barreras, tratando de:
- incentivar la lectura, desde el placer y el interés propio.
- promover el acceso al mundo de la literatura.
- crear un espacio ameno en donde las personas puedan, compartir, divertirse reflexionar.
- fomentar el dialogo y la comunicación.
- favorecer el desarrollo cognitivo de los usuarios.
En los encuentros se trabajan las lecturas que ha seleccionado la biblioteca, combinando la lectura individual con la lectura en grupo. Se aportan también nociones básicas sobre el autor, sus datos bibliográficos y el género literario, dando importancia al conocimiento de la obra literaria que se está trabajando. El momento de lectura se combina a su vez con actividades lúdicas, cine, plástica, pintura y teatro, ofreciendo con ello la oportunidad de que los usuarios puedan plasmar sus ideas y la comprensión de los textos de una manera creativa y libre, enfatizando siempre en el trabajo grupal para lograr la integración y el compañerismo entre los participantes del taller.
Las responsables del CRAD creen que la lectura y la creación de estos pequeños espacios de participación son una importante herramienta para los objetivos del propio centro, de manera que sus usuarios “a través de la participación y reflexión puedan apropiarse del proyecto y convertirse en sujetos conscientes de la realidad en la que se encuentran. Por esta razón podemos entrever la característica dual de la lectura, dónde la misma se puede tomar como medio y como fin. Hablamos de medio porque pensamos que favorece positivamente el desarrollo cognitivo del sujeto, al mismo tiempo que abre las puertas a diversos conocimientos como la historia y el arte. Puertas que van a permitir a los integrantes del taller viajar y conocer lugares y personas sin salir del centro. Les va a dar la oportunidad de trabajar su imaginación y su capacidad de creatividad. Y nos referimos a su carácter de fin porque consideramos que la lectura es en sí misma satisfactoria y se presenta como una alternativa válida frente a las formas de recreación inmediatas”.
(15 de marzo de 2012)