Coaña, celebraba el pasado 27 de mayo el Día del Libro y la Familia.Lo hacía convirtiendo en un acto festivo el proyecto “Nacer Leyendo“. Esta iniciativa se dirige a las familias para presentarles a su Madrina o Padrino dela Lectura, para brindar asesoramiento en materia de fomento de la lectura y para regalar un libro, una guía para fomentar la lectura en el hogar, un carnet de la biblioteca y una carta de enhorabuena a todas las familias del municipio en las que ha nacido un bebé a lo largo del año.
Los bebés coañeses, sus padres y madres, han participado en esta especie de “bautizo lector” en el que han recibido los consejos de Raquel Amaya Martínez González, profesora de la Universidad de Oviedo, quien acogía el título de Madrina del a Lectura con gratitud, entusiasmo y compromiso.
Tras felicitar al Ayuntamiento por la iniciativa y agradecer el título, se refería a las familias con estas palabras:
“Como docente e investigadora en el ámbito dela Educación, la iniciativa que ustedes desarrollan para promover el gusto por la lectura en los más pequeños desde el ámbito familiar, me parece innovadora y de interés social.
La familia es el primer agente socializador del ser humano, del que recibimos las primeras y las más poderosas influencias para nuestro desarrollo personal en todos los ámbitos, ya sea el intelectual, social, afectivo o motivacional.
Por ello, es especialmente relevante que los papás y mamás, los abuelos, abuelas y otros componentes familiares acompañen a los más pequeños en su proceso de desarrollo vital y también en el proceso de iniciarles en el gusto por la lectura y en desarrollar posteriormente en ellos y en ellas el hábito de leer.
Sabemos que el hábito de la lectura puede ser aprendido a través de la imitación de modelos. En esta forma de aprendizaje las personas relevantes para los niños y niñas más pequeños, como son los papás y mamás, los hermanos y hermanas mayores, los abuelos y abuelas, o el profesorado, juegan un papel esencial, porque si les ven leer a ellos, los pequeños también querrán hacerlo.
Con el tiempo, el hábito de leer influye positivamente en los estudios de los niños y niñas, ya que la actividad de estudiar necesita de la buena lectura.
Pero no es sólo en la actividad del estudio donde la buena y prolongada lectura beneficia a los niños y niñas, sino en toda su persona por lo que supone no sólo de información, sino también de formación.
¿Qué permite desarrollar la lectura en los niños y niñas (y también en los adultos)?
Entre otras cosas, a través de la lectura, los niños y niñas (y todas las personas) podemos: ampliar vocabulario, aprender y descubrir cosas nuevas, desarrollar el pensamiento, comprender mejor el mundo y a las personas que nos rodean, reflexionar, desarrollar la fantasía y la creatividad, sentir emociones, y sentirnos acompañados por los libros como buenos amigos. Porque los libros están siempre a nuestro lado cuando nosotros queramos contar con ellos.
Y… ¿Qué tipos de lecturas hay?
Existen distintos tipos de lecturas y, probablemente también, son muy distintas las motivaciones que llevan a ellas. Unas veces, por ejemplo, leemos el periódico porque nos gusta estar informados de la actualidad diaria; otras veces leemos novelas de acción si nos gusta la aventura; otras leemos comedias para divertirnos… y otras veces optamos por lecturas con un cierto nivel de especialización para cultivarnos en una temática concreta.
Pero en todas ellas realizamos una actividad intelectual, de mayor o menor grado, según sea el nivel de reflexión y abstracción que requiera el contenido de lo que se lee.
Además, hay una gran variedad de lecturas para cada etapa de la vida, que nos sirven de apoyo para lograr distintas metas que nos podamos plantear; por ejemplo: disfrutar en momentos de ocio, aprender en el contexto escolar y académico, o actualizarnos cultural y profesionalmente en cualquier momento. Pero nadie nace sabiendo leer
Pero nadie nace sabiendo leer. Por eso, es tan importante que la familia acompañe y motive a los pequeños y pequeñas en este aprendizaje.
¿Cómo lo puede hacer?
Por ejemplo, leyendo con ellos y con ellas de manera alegre y divertida, hablando con ellos y con ellas sobre lo que dicen los libros y…, como decimos, dedicando tiempo los propios adultos a leer para que los niños y niñas les puedan imitar.
Por ejemplo, la lectura de cuentos en voz alta con los niños y niñas muy pequeños les ayuda a entrar en contacto con los libros y con su contenido.
En casa, se puede organizar lo que podría llamársela HORA DE LECTURA EN FAMILIA para que los pequeños vayan conociendo los libros y se aficionen a ellos.
Más adelante, cuando van creciendo pero todavía no tienen una idea muy clara sobre la lectura, una buena forma de motivarles es ayudándoles a pasar de la lectura pasiva como oyentes a la lectura activa, donde ellos y ellas son quienes leen y elaboran historias sobre el contenido.
una forma de motivarles es pasar de la lectura pasiva como oyentes a la lectura activa, donde ellos y ellas son quienes leen y elaboran historias
También se pueden realizar actividades variadas que conecten la lectura con la escritura, por ejemplo: con palabras, creando historias, juegos escritos, construyendo pequeños diccionarios, escribiendo la lista de la compra, o escribiendo un sencillo diario.
A través de estas y de otras acciones similares, los más pequeños y las más pequeñas poco a poco conocerán el lenguaje y sentirán la necesidad de saber más, y al ampliar su vocabulario sentirán más gusto por leer, lo que les provocará nueva motivación para seguir haciéndolo.
Lo importante, una vez más, es crear el hábito y estimular el gusto y el placer de leer, hasta convertir la lectura en una afición personal, porque, en definitiva, la lectura es una aventura que ayuda a las personas a desarrollar la imaginación, satisfacer deseos, adquirir competencias personales, culturales y sociales que necesitamos para nuestro propio desarrollo personal y social, para comunicarnos con los demás y para integrarnos adecuadamente en la sociedad.”
Raquel Amaya Martínez González finalizaba su intervención regalando a la biblioteca un lote de libros para arropar con bibliografía una preciosa campaña que la convierte en Madrina dela Lectura y que busca animar a leer desde el inicio de la vida. Los 27 niños y niñas coañeses pasarán a formar parte del Gran Album de Bebés Lectores que se actualiza desde el año 2008 reúne los recuerdos y a los protagonistas de esta campaña.
(16 de junio de 2017)