Nombre y apellidos: José Antonio Simón Fernández Nicieza
Nombre de la biblioteca: Biblioteca Pública Municipal “Sandalio Suárez”
Localidad: Teverga
Número de habitantes de dicha localidad: 1.727
¿Cuántos años llevas trabajando como bibliotecario? ¿Y en esta biblioteca?
Comencé en enero de 1988 en la Biblioteca Pública de Teverga “Sandalio Suárez” y aquí sigo…
¿Desde cuando está funcionando esta biblioteca?
La biblioteca se inauguró el 24 de noviembre de 1954 por el Director de Archivos y Bibliotecas Sr. Sintes Obrador. En el acto hablaron el Alcalde, don Marcelino Miranda Suárez, el Gobernador Civil, don Francisco Labadíe Otermin y el Director General de Bibliotecas, don Lorenzo Rodríguez Castellano.
¿Qué te atraía de esta profesión?
Estaba preparando oposiciones e iba a estudiar todos los días a la biblioteca. Al encargado le salió un trabajo provisional en Oviedo y me preguntaron si quería sustituirle hasta su vuelta. Al no volver, continué hasta noviembre de 1991, cuando el Ayuntamiento convocó la plaza a oposición y tuve la suerte de aprobarla. Como se observa, empecé de casualidad pero desde que conocí a doña Carmen Prieto Alvarez-Valdés en las IV Jornadas para Encargados de Bibliotecas Públicas Municipales, celebradas en noviembre de 1988 en Perlora, cada día me gusta más… me encanta mi trabajo y todo lo que le rodea, tanto lectores como compañeros.
¿Con que libros te aficionaste a la lectura? ¿Cuales son tus escritores favoritos?
Con libros de aventuras, sobre todo, de Julio Verne y los comics del TBO, Pumby, El Capitán Trueno, Astérix y, sobre todo, Mafalda. Hoy en día me sigue acompañando y sigo disfrutando tanto como el primer día.
Mafalda, hoy en día me sigue acompañando y sigo disfrutando tanto como el primer día
¿Qué destacarías de la biblioteca?
La ubicación porque está en el centro de San Martín y el local porque se trasladó a la Casa de la Cultura, en el año 1987 y se aumentó con las obras de mejora realizadas el año pasado.
¿Qué perfiles de usuarios recibe? ¿Qué demandan principalmente los usuarios?
El perfil es el de persona mayor porque a raíz del cierre de la empresa minera HULLASA, principal fuente de ingresos y de puestos de trabajo para los teverganos en el año 1992, se produjo una pérdida de población continua. En 1992 había 2.627 habitantes y diez años después el Padrón Municipal era de 2.165 habitantes. A día de hoy, Teverga tiene 1.727 habitantes.
Como en la mayoría de bibliotecas, lo más solicitado por nuestros lectores son las Novedades. Gracias a nuestro Ayuntamiento, podemos ofrecer entre diez y doce libros nuevos, todos los meses. A primeros de cada mes, confeccionamos un folleto con las adquisiciones y lo repartimos, por el sistema de buzoneo, por San Martín.
¿Aconsejas lecturas a tus usuarios?
En las ventanas de los pasillos de las estanterías donde están los libros de narrativa, tenemos colocados dos carteles con los libros más leídos el año anterior, tanto de autores extranjeros como españoles. Así mismo, a la entrada de la biblioteca y al lado de la estantería de Novedades, hemos colocado un listado con los libros que más se están leyendo.
Además de esto y siempre y cuando nos pregunten, nos encanta ponerles sobre la mesa unos cuantos libros para que elijan los que más les gusten
Además de los servicios propios de la biblioteca, ¿Qué actividades suelen organizarse en la biblioteca?
Desde la crisis, sólo realizamos una actividad, el Día del Libro y porque nos sale gratuita. Convocamos a los colectivos de pensionistas y de mujeres a reunirse en la biblioteca para compartir lecturas y moscovitas.
¿Cuáles dirías que son las principales carencias de la biblioteca?
el principal problema de las bibliotecas es la falta de dinero
Como pasará en todas, el principal problema es la falta de dinero.
¿Hasta qué punto la localidad en la que está ubicada, y la población que hace uso de ella, ha condicionado las actividades que se organizan?
Como mencioné anteriormente, no realizamos actividades. En el año 2004, coincidiendo con la celebración del cincuentenario de la biblioteca, gracias a nuestro Ayuntamiento que asumió los gastos de edición, publicamos el libro Cincuenta años de lecturas y lectores en Teverga: 1954 – 2004, en el que hablamos de dos de las actividades realizadas, que mejor acogida tuvieron y más veces repetimos:
- ¿Te atreves a leer?” Los participantes, durante un trimestre, tenían que leer ocho libros. Elegían los títulos y si alguno no les gustaba, lo cambiaban por otro. A la devolución, entregaban un pequeño comentario sobre lo que más les había gustado del libro. Se colocaba un gran cartel en la zona de control, con los nombres de los participantes y ocho casillas, donde se iban colocando una estrella de colores por cada libro leído. Al final se les entregaba un diploma de “Superlectores” y un regalo.
- “Las Olimpiadas de la Biblioteca”, actividad de formación de usuarios que conocimos gracias a un artículo de Kino Valverde Vilches, de la Biblioteca de Montilla (Córdoba) y publicado en el nº 113 de la revista Educación y Biblioteca. En síntesis, consistía en tres pruebas: primera, buscar tres palabras en un diccionario enciclopédico; segunda, localizar tres libros en las estanterías de la biblioteca (se les facilitaba la materia, el autor y el título); y tercera, buscar tres biografías en la Enciclopedia Espasa. Para motivar el espíritu de superación de nuestros “bibliolímpicos”, las pruebas eran cronometradas; por eso, quince días antes de la fecha de celebración, convocábamos sesiones de “entrenamientos” con el fin de conseguir que dominaran la organización de la biblioteca y localizaran rápidamente libros, palabras y biografías. En la “ceremonia de clausura” se entregaba, a todos los participantes, medallas y regalos.
¿Hay alguna actividad que te haya producido especial satisfacción por la acogida que tuvo?
Sin duda, “Las Olimpiadas de la Biblioteca” porque la actividad está muy bien y coincidió en un tiempo que se podía estudiar en Teverga hasta 4º de la ESO y había muchos jóvenes estudiando.
A lo largo de tu trayectoria, ¿qué persona o personas (usuarios, visitantes ilustres, etc) te han llamado la atención?
Nuestro pueblo y, especialmente nuestra biblioteca, estarán siempre agradecidos a D. Manuel Lombardero Suárez por su amistad, generosidad y colaboración en favor de la lectura popular en Teverga.
Nacido en el pueblo de Campos, se trasladó muy pronto con su familia a Oviedo donde comenzó a estudiar y más tarde trabajó en la Librería Cervantes. Años después fundó la Librería Colón, de la que tuvo que desprenderse. Obligado a emigrar decidió hacerlo a Barcelona donde fundó la Editorial Corinto, de corta vida. Esta efímera pero fructífera actividad, le permitió entrar en el mundo editorial y conocer a D. José Manuel Lara Hernández, director de la Editorial Planeta. Es en esta editorial donde fundó el Crédito Internacional del Libro y desarrolló una gran labor a favor del libro y su difusión. Como escritor ha publicado tres libros: Asturias y los poetas (Nobel, 1996), Campoamor y su mundo (Planeta, 2000) y Otro Don Juan: vida y pensamiento de Juan Valera (Planeta 2004).
Nuestro pueblo y, especialmente nuestra biblioteca, estarán siempre agradecidos a D. Manuel Lombardero Suárez
En el año 1984 comienza su relación con nuestra biblioteca, donando en un primer y voluminoso envío 1.079 volúmenes que se registraron con el nombre de “Legado Sandalio Suárez” por expreso deseo suyo. Desde entonces, nos hace llegar periódicamente un paquete con nuevos libros. Son más de seis mil libros los que lleva donados y, a 31 de diciembre de 2016, el fondo es de 1.462 volúmenes.
¿Hay algún proyecto que aún no hayas podido realizar y que tengas siempre en mente? ¿Cuál es y en qué consistiría?
El único proyecto, que reiniciamos cada día, es intentar ofrecer a todos los lectores una atención personalizada, cordial y profesional.
¿Mantienes contacto habitual con tus compañeros de la Red de Bibliotecas? ¿Por qué canales?
Mucho menos del que quisiera. El contacto es telefónico o vía internet. La verdad es que echo mucho de menos los cursos de formación en Perlora. Servían para formarnos y, sobre todo, para conocernos, convivir y compartir experiencias. Ahora, de Pascuas a Ramos, coincidimos algunos en algún curso en Oviedo.
¿Sientes que tu trabajo es valorado?
Lo único que siento y es lo que más me importa, que me encanta estar en la biblioteca y nunca lo asocié a trabajo porque disfruto con lo que hago.
¿Como has ido viendo la evolución que ha ido sufriendo la profesión en estos años?
En lo personal, dándome cuenta del valor que le eché al principio para realizar un trabajo para el que no tenía preparación. Ahora, con la formación adquirida, es cuando empiezo a comprender lo mucho que me falta todavía para considerarme un bibliotecario. En el plano general, valorando la importancia que tienen las bibliotecas y su reconocimiento social. Por desgracia, a nivel institucional es muy diferente porque cada vez nos van recortando presupuesto y, lo que es peor, atención. Es desolador comprobar que a día de hoy todavía no tengamos una Ley de Bibliotecas en Asturias.
¿Sigues manteniendo la ilusión y la vocación que te atrajo hasta la profesión de bibliotecario?
Como ya dije, entré en este maravilloso mundo del Libro y las Bibliotecas de casualidad pero reconozco que fue lo mejor que me pasó en la vida. Con la Biblioteca me ocurrió lo mismo que con Mafalda, la encontré de casualidad y ya es parte de mi vida. Cada día me fascina más… como mi trabajo en la Biblioteca.
¿Ha habido algo que te resultase frustrante en estos años?
Frustrante nada porque el motivo principal y la razón de ser y existir de las bibliotecas es dar de leer al sediento y ese objetivo lo venimos realizando cada día a plena satisfacción. De los desencuentros, olvidos, mentiras y demás malandanzas con los gobernantes de turno, simplemente, nos olvidamos porque nuestros lectores son muchísimo más importantes.
Personalmente, y con la experiencia adquirida en este tiempo, ¿qué cosas cambiarías en caso de poder? Aspiro a que se respete y valore a las bibliotecas
Aspiro a que se respete y valore a las bibliotecas. Lo expresó maravillosamente Felipe, el amigo de Mafalda: “No sería hermoso el mundo si las bibliotecas fueran más importantes que los bancos…”
¿Cómo afrontas los retos para el futuro de esta biblioteca?
En una biblioteca de pueblo… Ejemplar como la nuestra, los cambios se producen muy lentamente. Lo fundamental es seguir intentando saber dar respuesta a las necesidades de los lectores, que son el alma de las bibliotecas y los que consiguen dar vida a los libros, gracias a la magia de la lectura.
(15 de noviembre de 2017)